Es increíble lo que cuesta encontrar el tiempo para escribir al menos una entrada en el blog, pero prometo que trataré de hacerlo al menos una vez a la semana, porque material, ufff... hay mucho.
Hoy por la tarde, cuando salí de la oficina, le di "jalón" a un amigo, o sea, para los que no son guatemaltecos, tal vez el término "ray" les es más familiar. En fin, este tema es de otro blog, no de este.
Volviendo a lo que les quiero compartir. Mi amigo y compañero de trabajo, un poco mayor que yo, es oriundo del interior del país, y juntos recordamos algunos platillos de nuestras mamás y abuelas.
Para empezar, ¿quién no ha probado las pacayas? La foto la tomé del sitio web de Irma Flores en Flickr, espero no se enoje, por ello estoy citando la fuente.
Bien, las pacayas se siembran en muchos lugares de Guatemala, principalmente en un lugar llamado Senahú, en el departamento de Alta Verapaz, su cosecha se da en los meses de marzo y abril, precisamente para la temporada de Semana Santa, por lo que no pueden faltar en la mesa chapina.
Como pueden apreciar en la fotografía, lo que está en el interior de la vaina es lo que se come, son como brochas de color verde claro y es preferible comerlas, ni muy tiernas ni muy sazonas.
Allí va una de las recetas de mi abuelita:
Ingredientes:
De acuerdo al tamaño de las pacayas que encuentren, compren una o dos por persona.
Tomate
Cebolla
Hojas de hierba buena
Sal y pimienta
Preparación:
- Limpie las pacayas retirando la vaina.
- Ponga a calentar agua suficiente en una olla, es necesario que las pacayas sean cubiertas por el agua.
- Agregue un poco de vinagre y sal al agua.
- Cuando el agua esté hirviendo, sumerja las pacayas y deje hervir durante 10 ó 15 minutos.
- Al finalizar, escurra las pacayas y tire el agua.
- En la misma olla, ponga más agua limpia, esta vez, solo con sal.
- De nuevo, cuando hierva el agua, sumerja las pacayas y deje hervir por 10 minutos más.
- Las pacayas deben quedar suaves pero firmes y el sabor amargo debió haber casi desaparecido.
- Retire los hilos de pacaya del tronco, séquelos con papel absorbente o un lienzo limpio.
- Corte las tiras en trozos de un centímetro aproximadamente y reserve.
- Corte el tomate y la cebolla en concassé.
- Pique las hojas de hierba buena.
- Mezcle todo muy bien.
- Salpimiente y sirva.
Mi abuelita nos servía este delicioso platillo de nuestra cocina, acompañado con tortillas de maíz, calientes y recién hechas. A veces, y mi gusto personal, le agregaba aguacate en cubitos y un poco de jugo de limón, pero, eso queda a su puro gusto.
Espero les guste esta entrada y que la disfruten, tanto como yo lo hice cuando era pequeño.
Hasta la próxima.
2 comentarios:
Esta entrada, Pacayas envueltas, ocupa el segundo lugar en visitas de este blog con 564 visitas. Muchas gracias...
Deliciosas y saludables😆😆😆😆
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